Un día heroico
A pesar de la
tormenta, salí dispuesta a acabar el trabajo. Sabía que iba a ser
un día muy duro, pero hay veces que uno tiene que comportarse como una heroína.
Después de dos horas buscándolo en aquel callejón oscuro lo encontré.
Detrás de unos
contenedores encontré a un bebe recién nacido, la pobrecita estaba helada de frio y sus ropitas
estaban sucias y mojadas por la niebla condensada. En la cestita donde se
encontraba el bebe no encontré ninguna nota y ninguna identificación sobre el
bebe entonces, decidí llevármelo a casa. En cuanto llegue cogí una caja de cartón
y la llene de mantas para poder colocar al bebe. Antes de todo eso cogí al bebe
y lo lleve a la bañera y le di un baño de espuma, cuando terminé cogí un barita
de cristal que tenia por casa y lo metí en la leche de ese modo pude darle la
leche sin que se me atragantase, y después de todo eso lo eche a dormir. De la
misma la pequeñaja se quedo dormida.
Cuando se durmió del todo
me quede pensando en que tenía que hacer
algo lo tenía que denunciar para que encontrasen a su madre o para que lo
llevasen a una casa de acogida, y así lo hice, a la mañana siguiente la lleve a
la policía, yo les explique como había sucedido todo y ellos decidieron
encargarse de la niña y llevarla a una casa de acogida. Pasados los meses salió
en la prensa como una mujer había perdido a su niña hace unos meses, y yo caí
en que esa niña era la misma niña a la que había salvado la vida, entonces cogí
y fui a recuperar a esa niña a la que había salvado yo de morir a la calle.
Esa misma tarde fui a casa
de la madre y vi a la niña sucia, delgadísima y echa un asquito no se la podía ni
ver de lo delgada que estaba, la casa estaba desordenada y sucia asique decidí entrar, la madre estaba tumbada en el sofá
y con una cerveza en la mano. Entonces Salí de esa casa de mala leche dirección a la guardia civil a
poner una denuncia. Llegue allí y puse aquella denuncia contra la madre de la
niña, entonces los agentes fueren a la casa y cogieron a la niña y se la llevaron, a
la madre la detuvieron y la pobre niña
estaba muy asustada y no paraba de llorar, asique los agentes me dieron a la
niña a mí para poder tranquilizarla. Cuando la cogí de nuevo después de varios
meses sentí como esa bebe era mía y sentí una felicidad enorme. Cuando todo
estuvo en orden nos alejamos de ese lugar y a la bebe se la llevaron a un internado y yo
me fui para casa, en el coche estuve pensando y pensándolo mucho decidí adoptar
a ese bebe, era lo único q me faltaba en la vida para tenerlo todo y al fin y
al cabo la encontré yo o ella me encontró a mí, y yo creo que con nadie más estaría
mejor que con migo asique así lo hice rellene la solicitud y me la concedieron.
Pasaron los años y mi niña seguía igual de guapa y feliz que siempre que cuando era bebe. Ese día que la recogí
de aquella casa fui una heroína para mi hija, fue un día heroico.
